Si bien no existen leyes explícitamente anti-LGBT en la RDC, la sociedad aún ve a las personas LGBT+ con malos ojos. Cualquier divergencia de los roles y presentaciones tradicionales de género se recibe a menudo con hostilidad y violencia.
En 2022, siete mujeres trans vivieron esta situación en carne propia cuando las golpearon y las desnudaron en público. Les hicieron elegir entre arder en la hoguera o someterse a trabajos forzados solo por ser transgénero.
Junto a agrupaciones colaboradoras locales, All Out recaudó el dinero suficiente para trasladar a las mujeres a un lugar seguro y darles apoyo por seis meses.
Gracias al poder de la comunidad All Out, las vidas de estas mujeres cambiaron para siempre. Ahora tienen una nueva oportunidad de vivir gracias a la generosidad de los miembros de All Out.